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Foto del escritorMarina Fugardo

¿En qué consiste la ley del hielo?

Marina Fugardo, 23/02/21


Pareja realizando la estratégia de la ley del hielo, FMDOS.


La ley del hielo consiste en una serie de comportamientos por parte de una persona que conllevan a un objetivo principal, ignorar, a través del silencio, a la otra persona.

Esta situación se da en diversas ocasiones como en las relaciones tanto de pareja como de amistad o vínculos familiares. Se le conoce como un mecanismo disfrazado de abuso psicológico, el cual se le aplica al otro integrante de la correlación.


El motivo del inicio de la estrategia es el previo conflicto entre personas, pero a diferencia de otros problemas, la “víctima” no sabe a qué se debe el enfado del otro/a. Quien causa este sentimiento de culpa en otros se caracteriza por practicar el control sobre la gente, ser personas inmaduras, con poca inteligencia emocional y cierta frialdad frente a los sentimientos ajenos.


Esta práctica consiste en ciertas acciones como dejar de hablarle a alguien, fingir que no se le escucha,negar cualquier tipo de comunicación directa con la persona,etc. Por otro lado, en el ámbito virtual, también se dan este tipo de situaciones como puede ser la contestación de mensajes mediante emoticonos, dejar “en visto” mediante se tiene una conversación o posponer una contestación.


En cambio, la parte afectada de la relación sufre de diversas maneras esta acción, ya que ocasiona sentimientos de tristeza y de culpa, pudiendo conllevar a una situación más grave como es la depresión. Mediante varios estudios, quienes sufren este sentimiento de exclusión se ven afectados por algunos cambios en el cerebro. Se trata de la “corteza cingulada anterior”, cuya función es detectar los niveles de dolor en un ser humano. Junto a esta consecuencia se suman los dolores de cabeza, problemas digestivos, insomnio, fatiga, presión arterial e incluso enfermedades semejantes al cáncer.


Un dato curioso sobre este hábito es que se le llega a considerar una herramienta educativa, pero en la mayoría de casos no es favorable ya que destruye vínculos personales. En cuanto al papel del practicante, el silencio es una estrategia para que la otra persona cambie su comportamiento aunque no sea del todo cierto, es un pensamiento propio de quien lo realiza.



Desde 1930, se han llevado a cabo terapias matrimoniales y clínicas por un motivo común, la ley del hielo. En los años noventa se empieza a estudiar esta circunstancia de la mano del profesor de la Universidad Cristiana de Texas, Paul Schrodt. Actualmente, se trata este tema de la mano de psicoterapeutas como la estadounidense Andrea Schneider, cuyo testimonio afirma : “es un arma típica -aunque no exclusiva- de los narcisistas”. Su versión aparece confirmada en la columna del portal especializado conocido como Good Therapy . Añade que este tipo de personas exigen que el otro se disculpe o que prefiera dejar una relación y comenzar de nuevo.


Karen Gonsalkorale, psicóloga de la Universidad de Sydney, ha investigado sobre el “ostracismo” y ha llegado a la conclusión de que las parejas entrevistadas para el experimento compartían un motivo por el cual realizaron cierta estrategia, castigar a la otra persona o no se responsabilizan de lo que hacían.


Para poder paliar este tipo de problema, ambos integrantes de la relación deben buscar una alternativa sana mediante el diálogo. En el caso de que uno de ellos se niegue, lo recomendable es darle su espacio y recapacitar sobre lo sucedido. Eso no significa que se deba apartar el tema a un lado pero sí intentar no agravar la situación.


En conclusión, los conflictos entre vínculos de amistad, pareja o familiar no deberían conllevar a problemas psicológicos ni de salud, por ello considero que hay que tener cuidado con la manera de actuación que utilizamos en ciertas situaciones.









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