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Foto del escritorPaula María

La historia de Hedy Lamarr, inventora y estrella de cine

Paula María, 17/06/21


Hedy Lamarr, llamada previamente Hedwig Eva Maria Kiesler, fue una inventora, ingeniera y actriz de Hollywood austríaca nacida en 1914.


Es reconocida por ser coautora de la técnica de transmisión en el espectro ensanchado, tecnología en la que hoy en día se basan las comunicaciones inalámbricas de largas distancias, como el WiFi o el Bluetooth.


Destaca su actuación en la película Éxtasis (1932), ya que fue la primera vez en la historia del cine que una actriz simulaba un orgasmo. Esto fue considerado como escándalo sexual y se prohibió la película en las salas de cine. Además, su familia, también estaba horrorizada por la situación y no la apoyaba.


Fritz Mandl, uno de los hombres más ricos de Alemania y magnate de la empresa armamentística, solicitó casarse con ella al ver el famoso y polémico film. Su familia, creyendo que esto sería buena idea para que ella “se centrara”, decidió condenarla obligándole a casarse con él. Este hombre le hizo conocer el infierno controlando cada segundo de su existencia. Ella era su objeto, su trofeo. Vivía en una gran jaula de oro y lujos, pero encerrada totalmente bajo el mandato de su marido, que no la dejaba estar sola en ningún momento y que, como se puede obviar, hizo todo lo posible para comprar todas las copias de la película Éxtasis.


Su marido fue uno de los hombres dedicados a surtir el arsenal de Hitler y Mussolini, y Hedwig, obligada a asistir a cada reunión de Mandl, aprovechó para aprender sobre la tecnología de la armamentística nazi. Consiguió escapar de él en uno de tantos viajes de negocios, huyendo hacia París, llegando a Londres y, finalmente, con destino a Estados Unidos.


En este punto cambió su vida: conoció al productor de películas Louis B. Mayer, quien le ofreció trabajo; eso sí, con la condición de cambiar su nombre para que se olvidara su relación con la polémica película. Y así fue: Hedwig Eva Maria Kiesler pasó a ser Hedy Lamarr, la actriz más glamurosa de las grandes pantallas.


Durante la Segunda Guerra Mundial, Hedy Lamarr contribuyó en la lucha contra el fascismo y se ofreció al gobierno estadounidense para otorgar toda la información confidencial de la que disponía por los contactos del que era su exmarido; pues, se puso a trabajar en las nuevas tecnologías militares.


Conjuntamente con el compositor George Antheil, desarrolló la patente de la temprana versión del salto de frecuencia, exactamente un sistema de modulación de señales por radio, como hemos apuntado anteriormente, mediante el espectro ensanchado, para poder combatir las interferencias de las potencias del Eje. Se dieron cuenta de que era posible cambiar de frecuencia de la misma forma que se cambian las notas en una pianola, cosa que permitió controlar los torpedos y la comunicación, además de, a día de hoy, utilizarse para las redes móviles y dispositivos como el WiFi y Bluetooth.


Fuente: Parabrisas


Aún así, es cierto que nadie reconoció la utilidad de este invento hasta mucho después, cuando ya era tarde. La actriz no consiguió beneficiarse económicamente por esta patente, que caducó sin ser utilizada. Además, la patente no pudo ser reconocida correctamente porque se daban con el nombre de casada (H.K. Markey), no por el nombre artístico, cosa que siempre impidió que se la recordase.


Tras la guerra, Hedy fundó su compañía cinematográfica mientras seguía con su vida de inventora de manera secreta, ya que podría ser perjudicial cara a la opinión pública. De hecho, cuando ella dejó la compañía, nadie la asociaba a ningún invento.

Como actriz, destacan sus actuaciones en Lady of the Tropics (1939) y I Take This Woman (1940). En total, realizó 30 películas, hasta que en 1958 dejó el cine.


Su vida personal, como se puede intuir, no fue afortunada. Tras seis divorcios y con el declive de su carrera cinematográfica, Lamarr empezó a obsesionarse con la cirugía estética y el consumo de drogas. Finalmente, murió en enero de 2000 y sus cenizas fueron, en parte, esparcidas por los bosques vieneses y, otra parte, entregadas al consistorio vienés para un memorial.


Hoy en día, en Austria, cada 9 de noviembre, se celebra el Día del Inventor/a en su honor.


Bibliografía:


«Bombshell: la historia de Hedy Lamarr» de Alexandra Dean | Filmin. (2020, 8 mayo). YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=1Rc4DdZzGp8

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